En el apartado gastronómico, destacan los productos típicos de la matanza casera como jamones, lomos, salchichones, chorizos, morcillas… así como el queso de oveja merina típico con denominación de origen Queso de la Serena.
También podemos degustar diferentes platos de caza de la zona: guisos y estofados de conejo y liebre, perdices con judías blancas o escabechadas, etc.
Igualmente debe ser mencionada la caldereta extremeña, principalmente de cordero y también de cabrito, como plato estrella de las grandes celebraciones camperas.
En cuanto a platos vegetales destacan el gazpacho extremeño, el pisto extremeño y el boronío, (llamado en otros lugares alboronía y que llevamos a América, donde es más conocido como boronía), cuya principal diferencia respecto al pisto es que lleva berenjena (lo que lo asemeja al ratatouille provenzal o a la samfaina catalana) y, sobre todo, por el machado a base de comino que se le añade.
En repostería, lo más típico es la Rejeñía, y los Rosquetes del Jueves de Compadre, aunque también se puede disfrutar de otros dulces típicos como las rosquillas, perrunillas, cubiletes y prestiños, que es como llamamos a los pestiños.